Mensajes clave



Mensaje 1. La coherencia y cohesión del conjunto de los ODS se ve reforzada por la identificación de tres pilares fundamentales para su consecución: la lucha contra la pobreza, el impulso de la equidad y la promoción del crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, basado en el empleo pleno, productivo y el trabajo decente, como una combinación efectiva para generar modelos de desarrollo que resulten verdaderamente sostenibles.



Mensaje 2. Los ODS deben ser entendidos como una red de relaciones y sentidos convergentes en el desarrollo sostenible abordado en su triple dimensión económica, social y ambiental. Esa red se expresa también en las escalas involucradas en su implementación: no solo se trata de la necesidad de comprometer al conjunto de los actores con capacidad de influir sobre los resultados esperados, sino de avanzar en un trabajo a múltiples niveles que incluya a un tiempo lo local, lo nacional, lo regional y lo global.

Mensaje 3. Se debe adoptar una visión integral e integrada, basada en una aproximación holística capaz de captar y articular las relaciones y sinergias entre objetivos y temas interdependientes; un modelo de trabajo que requerirá de un diseño institucional adaptado a los nuevos retos y abierto a la participación de todos los actores del desarrollo. Es por ello que el financiamiento oficial de la Agenda 2030 deberá prestar atención a los niños, niñas y adolescentes en situación de trabajo infantil, un camino que deberán profundizar la Cooperación Sur-Sur y el sector privado, que por su propio rol en la esfera productiva tendrá un papel que debe recibir especial atención.

Mensaje 4. La Agenda de Acción de Addis Abeba, aprobada por la III Conferencia de las Naciones Unidas para la Financiación del Desarrollo en julio de 2015, ha dado pasos en esa dirección al reconocer que "invertir en los niños y los jóvenes es fundamental a fin de lograr un desarrollo inclusivo, equitativo y sostenible para las generaciones presentes y futuras" y reafirmar "la vital importancia de promover y proteger los derechos de todos los niños, y de asegurar que ningún niño se quede a la zaga" (párrafo 7).



Mensaje 5. La dimensión del trabajo decente, expresada en el ODS 8 y sus metas, se sitúa en el núcleo mismo de la Agenda 2030 y evidencia que se trata de estimular estrategias económicas en cuyo marco se creen más y mejores puestos de trabajo para generar un poder adquisitivo que promueva la inversión, lo que a su vez elevará la productividad y aportará competitividad y prosperidad a un mercado globalizado. Pero este proceso no será automáticamente ni sostenible ni inclusivo, ello requerirá disponer de un marco de instituciones, organizaciones, leyes y políticas y de una cultura de diálogo social que permitan gobernar el mundo del trabajo y el funcionamiento de los mercados laborales.

Mensaje 6. En su conjunto, el ODS 8 proporciona las bases económicas esenciales para avanzar en el logro de la meta 8.7 que busca la erradicación del trabajo forzoso, poner fin a las formas modernas de esclavitud y asegurar la prohibición y eliminación de las peores formas de trabajo infantil, incluidos el reclutamiento y la utilización de niños soldados, y, a más tardar en 2025, poner fin al trabajo infantil en todas sus formas. Sin embargo, el logro de esta meta depende a la vez, que se avance en otras comprometidas en diferentes ODS que resultan estratégicos al estar asociados a temas que constituyen causas del trabajo infantil o que están a la base de la respuesta efectiva que se le pueda dar en el territorio.



Mensaje 7. Poner fin al trabajo infantil en 2025 implica a su vez avanzar en por lo menos 35 metas que, incluidas en objetivos diferentes al ODS 8, mantienen directa relación con la disminución del trabajo infantil e implican fortalecer la coherencia de las políticas públicas en el nivel nacional y promover el apoyo mutuo a nivel global y regional:



Mensaje 8. La creación de la Iniciativa Regional América Latina y el Caribe libre de trabajo infantil es una expresión de esa búsqueda de apoyo mutuo para avanzar en el cumplimiento de la Agenda 2030. 27 gobiernos, junto a organizaciones de empleadores y de trabajadores integran esta plataforma de cooperación intergubernamental que se ha propuesto acelerar la reducción del trabajo infantil en América Latina y el Caribe y alcanzar la meta 8.7, a través del impulso de una nueva generación de políticas que puedan responder eficazmente al cambio en las condiciones económicas prevalecientes, que en buena medida han impulsado la reducción del trabajo infantil que actualmente exhibe la región.

Mensaje 9. Basada en un enfoque de alineamiento de políticas y de apropiación de los actores nacionales, la Iniciativa Regional ha diseñado una estrategia de aceleración que tiene cuatro resultados:

  • Lograr la primera generación libre de trabajo infantil a 2025, centrado en un abordaje preventivo con medidas prioritarias por grupos de edad de 0 a 17 años.
  • Retirar del trabajo infantil a niños y niñas por debajo de la edad mínima de admisión al empleo, centrado en un abordaje de protección y restablecimiento de derechos.
  • Retirar a los y las adolescentes del trabajo peligroso, centrado en un abordaje de sustitución de actividades, combinado con formación y capacitación.
  • Erradicar las formas delictivas de explotación, centrado en un abordaje de protección judicial y retiro inmediato.

Para implementar esta estrategia, el análisis integrado de los Objetivos de Desarrollo Sostenible resulta crucial, pues aporta criterios para impulsar medidas contra el trabajo infantil en políticas y programas más amplios como promoción del empleo, educación, lucha contra la pobreza y la desigualdad, políticas de desarrollo agrario y de salud, entre otras.

Mensaje 10. En este contexto, la Iniciativa Regional América Latina y el Caribe libre de trabajo infantil constituye una plataforma idónea para aunar las voluntades políticas y las capacidades de diferentes actores clave, públicos y privados, que con el apoyo de la cooperación internacional pueden lograr poner fin al trabajo infantil en 2025 y dar así un paso esencial para la construcción del desarrollo sostenible que el mundo se ha fijado como destino.